lunes, 15 de octubre de 2007

So-bre-Porte (La tarea de encomendar nuestros únicos soportes)


№logia critica de los sueños que olvidamos en reposo

!La maravilla de vivir hueon!
...

Con el juguete sofisticado de las deudas. Y uno bailando al ritmo de sus tontitas mirAdas recortadas por falsos extraterrestres en el cielo y uno que otro sueño ingenuo bañado en olores (oscuros) faltos de verosimilitud.

Si le miro, le digo, contigo, no sigo, porque cuando vivo, no soy mendigo, ...solo en un bonito amor..., te sigo un poco, donde algún testigo, que me corrobore tu caricia pasada a pasado, como algo, fidedigno, de mi acrónico signo, en el cual vivo, para poder morir en un digno siglo con banderas de colores y no con murallas de malos olores.

Olores oscuros otra vez,
...por ser poco prudente dentro de la inmediatez

(el que reclama por compañía es porque alguna vez recibió el ½ afecto)

Su mejor truco me lo propone con mentira, yo le sigo con otra que viene al caso por la significación de la mentira de ella y así me parece que soy yo el ams hueon, pero en cualquier caso, participo de la mentira de ella y solo así cumplo su deseo inconsciente (verdadero) y me siento tЯanquil-osado de alguna manera.

Me importa un soberano coco la lluvia, la peste, la guerra, el odio, la mentira, el sudor, los éxitos, el dolor, la libertad, la equidad, el hambre, lo extraño, la quimera, tener una memoria linda, copiar gestos, reunir falsas sonrisas, justificar lo malo, justificar lo bueno, correr con las manos, perder algo de dinero, la sabiduría, pelear con el presidente de turno, proponer malas ideas, pisar caca, imaginar que imagino, escribir, recuperar mi infancia... en este momento me importa un soberano coco las cosas que me importan un soberano coco, en este momento me importa algo que no me debe importar y por eso me importa un soberano coco las cosas que no me deberían ni siquiera importar y por eso me importa en pequeñez sufrir la regularidad de una entonación magistral...

Creo en los gritos de media noche que resuenan en toda la cuadra entre otros gritos
y creo en mi casita que me espera bajo el aguita que piso cristo alguna vez, ha-ver si me ahogo por una razon divina y no por la violencia de unos ojos delineados

Espero en que lo que me importa un soberano coco en verdad me importe un soberano coco cuando mi vida todavía no valga completamente un soberano coco

Creo en "lo" feliz, por supuesto...
Pero si espero mas de la cuenta repito los números y cuento de forma progresiva hacia el infinito de la negra esquina y recorro el mismo destino al día siguiente con la esperanza de que me recupere de mi poca justificada tristeza.

Me quede con al tos seca de la risa de un cercano.
Y pasó (ligero) el llamado que se me había pasado hace un tiempo atrás

Parte mejor, antes de que tu-arte trate de encontrarte por lo que de exceso quise penetrarte.

3 comentarios:

Andrés Orfali Plaza dijo...

por favor, no comente comentarios pajeros pasados por formalina pseudopsicológica. Sobretodo si no lo conzco. Gracias.
post scriptum: Lo que escribo sólo lo interpreto yo, para mi, prescindiendo del idiota que hay en mi. Por ello, prescindo además de otros.
gracias, again.

Dailhar dijo...

La soberanía del coco. (sentadas de playa)

A pesar de todo
el budismo
entendió sobre la tierra*
la conexión médicinal entre
aquellos vellos-sensitivos-testiculares
apegados al barro
y el espíritu
que se haya bajo la corteza
y quizás dónde.

*: esa que no se acaba nunca, la tierra del labrador, la tierra del que juega con tierra, la tierra de los niños, la tierra donde se pierden esas monedas que valen toda una infancia, la tierra de las hojas donde crecen cosas imposibles de crecer, la tierra donde caen
sus
uñas

UÑAS, de eso se trata todo.
o al menos eso es lo que decía el mercurio ayer por la mañana.

Anónimo dijo...

Está bueno, loco.